Honda CBR 125R 2011

Con un gran éxito desde su lanzamiento en 2004, 14.000 modelos de la pequeña CBR han encontrado un piloto en el sillín desde entonces. Para 2011, la nueva Honda CBR 125R recibió un bonito lavado de cara, pero no sólo eso, sino que ahora es más una moto que una motocicleta…

Es cierto que al proponer una moto de aspecto bastante agradable, ligera y muy económica, Honda podía esperar un buen éxito. Pero no hace falta insistir, el regreso de los 2 tiempos no es por ahora.

Mucho más que un simple lavado de cara, la CBR 125R 2011 es casi completamente nueva, señala el concesionario de motos de ocasión Crestanevada. Se ha cambiado casi todo, desde el tamaño de los neumáticos y la inyección de combustible hasta el basculante y el velocímetro. Para 2011, Honda no utilizó la parte trasera del cazo.

Tras pasar por encima de la 125R y tomar asiento en el nuevo asiento de 785 mm de altura, arranco el motor para calentar la bestia… En el lateral, la nueva 125R recuerda directamente a la 250R y a la VFR 1200. Los colores son muy racing (¡sobre todo el naranja!), la calidad del montaje es buena y la de la pintura también. Sólo los espejos son un poco desproporcionados para la delgadez de la moto pero son útiles. Por otro lado, tengo una pequeña reserva respecto al imponente tamaño del silenciador cubierto por su carcasa gris.

El bloque del velocímetro también marca la pauta. Atrás quedan los antiguos cuentakilómetros de aguja… el cuentakilómetros del modelo 2011 respira deportividad y herencia CBR. El cuentavueltas es el que más espacio ocupa y en la esfera digital hay muchas informaciones disponibles (indicador de combustible, tiempo, recorrido total, recorrido parcial, velocidad,…). Obsérvese que la 125R comparte el velocímetro con su hermana mayor, la 250R…

Nada más salir del hotel, nos dan un paseo de 60 km. Pero a la espera de encontrar caminos más rodantes, aprovechamos la ciudad para secar un cuero que había cogido mucho el día anterior y para comprobar que, a pesar del aumento del tamaño de los neumáticos (100 delante y 130 detrás), la 125R ha mantenido toda su viveza prometiendo un paso por curva fácil y natural. Su radio de giro le permite zigzaguear dentro y fuera de los carriles de coches sin preocupaciones. También le ayuda su peso de 137 kilos y su equilibrio general.

El nuevo depósito de combustible de 13 litros ofrece la ventaja de apretar la CBR entre las piernas y, según el fabricante, de poder recorrer casi 490 km con el depósito lleno. La posición es perfecta para gente de mi talla (170 cm) y el pecho está ligeramente adelantado, las manos en las semiguías (baratas, por cierto) en las que hay un acelerador a la derecha, tendrás que escurrirlo para que funcione… como «On/Off», ¿ves? Y a decir verdad, ¡no nos privamos!

Pero antes de jugar a los codos, el mono de la 125R y la caja de cambios se mostraron muy cómodos en ciudad, permitiéndote ir con el acelerador en ristre y sin hipo. Sólo algunas vibraciones vendrán a hacerte cosquillas, pero nada demasiado grave, y la cómoda amortiguación permite borrar las asperezas de la carretera…